Con la promesa de un trabajo bien pagado, pero entrando de manera ilegal a Canadá. Fue la desgracia para 43 mexicanos que acabaron esclavizados.
Y aunque suene extraño, en pleno siglo XXI este tipo de cosas siguen ocurriendo.
Estos mexicanos, en su mayoría hombres jóvenes, acabaron haciendo limpieza en hospedajes, pero casi sin pago.
Afortunadamente, alguien se apiadó de ellos y al saber su situación, dio aviso a la policía.
Así, la Policía Provincial de Ontario (OPP), rescató a los 43 mexicanos que se encontraban en condiciones de “esclavitud”.
Informó que estas personas habían llegado ilegalmente a Canadá a través de una red de tráfico de personas.
Dio a conocer que los mexicanos vivían en precarias condiciones en unas casas improvisadas en la localidad de Barrie.
Desde ahí, los transportaba una red criminal, para trabajar en hoteles y establecimientos turísticos en Ontario.
Esta fue la suerte que corrieron estos mexicanos, en su intento por cumplir su ‘sueño canadiense’.
Lo peor, es que ni tenían un buen trabajo y además, pagaron fuertes sumas de dinero para que los llevaran de México a Canadá.
Las personas que los retenían les cobraban por alojamiento, transporte y muchos otros conceptos.
Al final del día, tras hacerles todos esos descuentos de sus ‘salarios’, les daban una cantidad mínima.
Algunos refirieron que fueron atraídos a la red ilegal a través de anuncios en redes sociales en los que les prometieron oportunidades laborales en Canadá.
Además, los propietarios de los hoteles que los contrataban no sabían en qué condiciones se encontraban. Estos les pagaban a las personas que los controlaban.
Tras ser rescatados, los 43 mexicanos fueron trasladados a un centro comunitario para ser atendidos y pudieran alimentarse y asearse.
Por suerte, algunos ya han recibido varias ofertas legales de empleo.
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